Acaba de presentarse (15-7-2015) en la sede de Naciones Unidas el nuevo informe Envejecimiento activo: un marco político en respuesta a la revolución de la longevidad. Actualiza el documento publicado por la Organización Mundial de la Salud en 2002, con motivo de la 2ª Asamblea Mundial sobre Envejecimiento (Madrid). El alma mater del nuevo documento es Alexander Kalache (Presidente de ILC-Brasil) y ha estado coordinado por Ina Voelcker y Louise Plouffe.
Envejecimiento activo no sólo es un concepto sino sobre todo una herramienta o un marco de referencia para el diseño de políticas dirigidas a los individuos y a los grupos de población. El concepto captura una visión positiva y completa del envejecimiento como una aspiración individual y como un objetivo político. Se define como el proceso de optimización de oportunidades para la salud, el aprendizaje a lo largo de la vida, la participación y la seguridad con el fin de mejorar la calidad de vida de las personas mientras envejecen. Introduce como novedad respecto al anterior informe la importancia de la resiliencia, es decir, la capacidad para adaptarse o para soportar los desafíos que se presentan a lo largo de la vida. Por ello, han introducido un cuarto pilar, el aprendizaje a lo largo de la vida, a los tres pilares del envejecimiento activo presentados en el antiguo informe (salud, participación y seguridad).
Como marco de referencia o herramienta para el desarrollo de políticas, el Informe desgrana hasta un centenar de recomendaciones dirigidas a diferentes actores, sobre todo al gobierno (96), a la sociedad civil (45), al sector privado (37), al mundo académico (30), a los medios de comunicación (15) y a otras organizaciones intergubernamentales (11). Estas recomendaciones están agrupadas en los cuatro pilares del envejecimiento activo y en una serie de recomendaciones transversales.
Envejecimiento activo es una estrategia consolidada. Ha sido incluido en políticas locales, regionales, nacionales e incluso intergubernamentales. Es el concepto subyacente en dos grandes programas de la OMS: Age-Friendly Primary Health Care Centre Toolkit y Age-Friendly Cities Guide. Finalmente, la Comisión Económica de Naciones Unidas para Europa y la Comisión Europea han desarrollado conjuntamente un índice de envejecimiento activo, con 22 indicadores.
por Antonio Abellán García. Departamento de Población, CSIC